Todas las chicas en el gay parade hoy llevaban pantaloncitos cortos. Todas. Evidentemente está de moda; ahora lo que yo no entiendo es que se pague dinero por ellos. Te cortas unos viejos que no te gusten ya y vas que chutas. Hemos ido en bici asi que esta combinación de pantalón corto con camisa super super volátil, de Solitaire por $8 en Marshalls, ha sido pefecta porque se me levantaba y me refrescaba. No me la pongo mucho pero la tengo cariño porque regalé una igual a mi hermana. A ella le pega más que a mi.
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